jueves, 26 de septiembre de 2019

Review: Super Aqua Ultra Water Full Jelly Mist de Missha



¡Buenas tardes, corazones! ¿Cómo va todo? Espero que muy, muy bien.

Adoro las brumas faciales. Y con el calor, más aún. Es impagable la sensación de frescor que te otorgan aunque sea por unos momentos con las temperaturas que solemos manejar aquí en el sur (aún a las fechas que estamos).

Mis favoritas entre las favoritas son las brumas a base de agua termal. Me aficioné a ellas siendo el peque un bebé (las usaba para refrescarlo, le hacía mucha gracia y se reía a carcajadas) y ya son parte de mi rutina veraniega porque durante el invierno me cuesta mucho eso de rociarme un producto frío sobre la cara, jajajaja. Junto a estas favoritísimas intercalo otras, más específicas y con fórmulas más elaboradas, como ésta que voy a reseñaros hoy y que no es una bruma muy típica que digamos: la Super Aqua Ultra Water Full Jelly Mist de Missha. Ahí se queda el nombrecito, jajajjaa.



No creo que tenga nada que deciros sobre Missha que ya no sepáis... se trata de una de las marcas de cosmética coreana más conocidas y más vendidas en nuestro país. Su gama de productos es inabarcable, tienen de todo para todas las necesidades.


Aquí tenéis una "breve" descripción de esta bruma, que no es bruma propiamente dicha como os decía antes (al menos como yo entiendo las brumas), sino un gel hidratante con este formato, el "mist" (en castellano, bruma).

Posee el denominado "Triple Aqua System" que crea una capa selladora del agua, luego una capa "esponja" encargada de absorberla y otra "tank" como reserva de hidratación. Todo ello destinado a evitar la pérdida de agua en las capas superiores de la piel. Todo ello con una fórmula ligera y no pegajosa, nos dicen.




La Super Aqua Ultra Water Full Jelly Mist se nos presenta en una caja preciosa de cartón, metalizada en tonos de azul y serigrafiada en blanco. Dentro, un envase de plástico, en tonos azules degradados y con un dispensador en spray que hace su uso muy cómodo. Tiene una capacidad de 100 ml y su precio ronda los 16 €.


Tenemos la gran ventaja que las explicaciones en la caja están también en español, y esto es lo que nos dice del preoducto: "Aqua rocío brillante y humectante cuya textura única estilo gelatina y enriquecida con humedad, se convierte en partículas hidratantes que dejan su piel perfectamente hidratada al humectarse". Bueno, ya lo sé, la traducción no es una joya pero es todo un detalle que la pongan en español, jajajaja.

Además, asegura que "El Fruits Jelly Complex (complejo gelatina proveniente de las frutas lichi, rambután y carambola) con sus cualidades fluidas y gelatinosas y enriquecida con humedad, se adhiere a la piel y crea una barrera humectante al instante de aplicarse. El rocío Jelly Mist con su buena adherencia no se escurre ni evapora fácilmente: mantiene la piel sana a través de una hidratación completa.
Contiene extractos de árbol de baobab y adenium que mejoran los beneficios que retienen a la humedad y previene la resequedad al crear una capa humectante sobre la piel y al activar la energía hidratante".

Así que tenemos una hidratante de larga duración en "jelly mist" o bruma en gelatina, que puede usarse antes y después del maquillaje, como tónico, mascarilla o simplemente para refrescar la piel, igual que una bruma clásica.

Y ahora veamos cómo va de ingredientes esta muchachita... Aquí os dejo el enlace del análisis del COSDNA.




El análisis es bastante correcto: sobran un par de PEGs, el phenoxyethanol, una silicona, el sodium benzoate y el perfume del final, pero por lo demás está bastante bien. Lo que más me gusta son los aportes naturales: lleva agua mineral, extracto de baobab (que me encanta, lo he probado en mask sheets y mi piel lo agradece muchísimo), extracto de higo chumbo (otro que me encanta), hierba de sangre japonesa, y extractos de las frutas carambola, litchi y rambután (de esta última, extractos del fruto y la hoja) que son los que le dan la textura gelatinosa.

Pero esto de la textura jelly... ¿cómo es?



Bueno, no puede decirse que sea una bruma muy fina o que se pulveriza bien, porque al no ser agua, sino gelatina, pues al echártela en la cara como que se nota bastante, jajaja. Sin embargo, incluso sin ser tan liviana como una bruma más tradicional, debo decir que se absorbe rapidísimo. Tiene un leve perfume floral que yo veo prescindible, pero se disipa pronto y no resulta molesto. Yo no me toco la cara tras aplicármela, ni toquecitos ni nada, y a los pocos segundos ya no queda ni rastro. Tampoco residuo pegajoso. Eso sí, se nota la hidratación enseguida, deja la piel muy cómoda y fresca. Yo suelo usarla un poco para todo (fijar la bb, como tónico a veces, incluso como hidratante facial sustituyendo a la crema clásica) pero mi momento favorito es sin duda tras salir de la ducha, que noto la piel del rostro un poco seca... es ponérmela y esa sensación se va inmediatamente. 

Así que tengo que deciros que, a pesar de ser fan de las brumas finísimas y ultra pulverizadas, ésta me encanta y realmente cumple lo que promete: da una hidratación estupenda a la piel que se mantiene bastante tiempo. Para la época calurosa que hemos pasado me ha venido genial. 

*Puntuación Total: 4/5.

Y he notado que al ser gelatina como que dura más, no sé por qué, pero me está cundiendo que da gusto. Quizá porque con un par de pulverizaciones es más que suficiente para el rostro, así que os durará bastante y creo que resulta una buena inversión si sois de piel seca o se os deshidrata a la mínima como a mí.


¿Será la crema facial tan refrescante e hidratante como esta gelatina? En este tipo de hidratantes, fresquitas y tipo sorbete (a las cremas me refiero) mi favorita es sin duda la Super Aqua de Nature Republic (usé la Aquasource de Biotherm que me regalaron por Navidad pensando que iba a ser parecida y terminé regalándola del chasco que me llevé). Pero viendo la línea tan extensa de la Super Aqua Ultra Water Full, me da curiosidad por probarla... tengo que buscar por si tengo alguna muestra por ahí.

¿Qué os ha parecido esta entrada? ¿Usáis brumas? Y esta línea de Missha, ¿la conocéis? Si podéis informarme sobre ella, ¡no dudéis y comentad! Me encantaría poder saber un poco más de estos productos de cara al invierno, donde mi piel necesita un refuerzo de hidratación.

¡Pues nada, amores! Hasta aquí la entrada de hoy. Sed muy, muy felices y un abrazo muy grande. ¡Nos vemos en la próxima entrada!

jueves, 19 de septiembre de 2019

Review: TEN Shadow Off Eye Cream de Cremorlab



¡Hola, amores! ¿Qué tal os va? ¿Fresquete ya por ahí? Por estas tierras aún aguanta, aguanta... es tradición cambiar a la ropa "de frío" tradicionalmente por el puente de Todos los Santos, así que aún nos queda tirón del bueno...

Hace unas cuantas entradas de blog os comenté las bondades de los productos de la línea TEN de Cremorlab que estaba usando. En concreto, os hablé del tónico y la esencia, basados ambos en el agua termal que les da nombre y que nace en la región de Geumjin, en Corea. Os conté con pelos y señales cómo era cada producto y lo mucho que me gustaron, sobre todo la esencia (a la que echo muchísimo de menos). Hoy, para completar, toca la reseña de otro producto de la misma línea: el TEN Shadow Off Eye Cream.


Pues sí. Ya llevo un par de meses usándolo y me parece conveniente dar mi opinión al respecto. En la red no hay muchas reseñas de este producto y me parece curioso, ya que Cremorlab es una marca coreana bastante conocida y con muchos fans... en fin. Misterios de Internet.

Primeramente, veamos qué dice la web oficial de Cremorlab sobre este contorno de ojos. Es algo así como "Contorno de ojos de doble función: iluminador y antiarrugas. Reduce las líneas de expresión y las zonas oscuras del área de los ojos".

Muchas promesas veo yo aquí, ¿cómo se supone que va a cumplirlas? De nuevo, la marca dice:

  • Alive Mineral, T.E.N.™
    The most effective balance of both rare and essential minerals from Cremorlab’s Patented T.E.N. Mineral water are absorbed into skin for added protection from external environmental stress factors
  • Dull-looking & Dark Eye Area
    Brightening Eye Cream infused with Niacinamide helps lighten dark circles. Contains Royal Jelly Extract to deliver moisture and nourishment to dull-looking and fatigue eyes for a healthier look.
  • Healthy-looking & Firmer Eye Area
    Palmitoyl Oligopeptide helps reduce puffiness while Adenosine, improves the appearance of fine lines around eye area.
Tenemos pues, una crema que actúa como iluminadora/minimizadora de las zonas oscuras del contorno de ojos a la vez que ejerce efecto antiarrugas. Todo ello basándose en el agua termal que le da nombre a la línea y en otros ingredientes como la niacinamida (iluminador), la jalea real, el oligopéptido palmitoyl o la adenosina.

Bueno. Pues éstas son mis fotos y mi experiencia con él.






Siguiendo la misma línea de los otros productos TEN, este contorno de ojos se presenta en una caja de cartón con doble envoltura, con un serigrafiado sencillo en negro y gris. 




Dentro, un tarro de cristal precioso con una capacidad de 15 ml. Ahora que lo pienso no recuerdo si traía espátula o no (como no las uso, acabaría, si la traía, guardada en un cajón) y con ese diseño tan bonito que ya me enamoró en la esencia. Mirad qué tapa más linda.




La crema en sí es blanca, ligera, con cierto aroma floral muy leve. Para aplicármela no uso la espátula que incluye (ya sé, debería hacerlo) y con mojar un poquitín el dedo tienes suficiente para ambos ojos, con lo cual dura bastante. Y menos mal, porque económica no es. En la página oficial ronda los 50$ (aunque la he visto de oferta por 15$), que no es moco de pavo. Yo la compré en una de las ventas de Beaute Privee junto a más cosas de la marca Cremorlab y me costó 13,50€, que está más que bien porque supone una reducción brutal de su precio real.


Ahora demos un repasito a la lista de ingredientes. Y para comenzar con ello os voy a dejar el link a una web que he descubierto recientemente y que me gusta mucho, se llama Cosmeteia. En ella hacen un exhaustivo análisis de los ingredientes, los clasifican en naturales y sintéticos y los enlazan con la clasificación de la EWG; todo de una manera muy visual, limpia y agradable. Podéis cotillear el análisis completo de esta crema aquí mismo:


Cremorlab Shadow-Off Eye Cream contains 42 ingredients. It's free of harmful alcohols, allergens, sulfates, parabens and synthetic fragrances. But we have found comedogenic components, gluten, fungal acne feeding components, silicones and polyethylene glycol (PEG). See the list below for details.

Por ejemplo, hay dos listas principales: Efectos Positivos y Ingredientes Potencialmente Dañinos. Luego está la clasificación por riesgo según la EWG y luego otra lista con los porcentajes de ingredientes naturales y sintéticos. Finalmente, la lista completa con los 42 ingredientes y al lado de cada uno, un resumen de su origen, riesgo y efecto con iconos la mar de apañados.

Lo que os decía, a partir de ahora Cosmeteia se va derechita a mi barra de Marcadores, jajajaja.

Así que, resumiendo, tenemos un producto con un aporte de químicos importante, tanto inofensivos como algunos con más riesgo (EWG del 3 al 5). Además de eso, contiene extractos naturales (21% frente al 19% de químicos, lo que supone un cosmético equilibrado en cuanto a aportes).

¿Y cuáles son los extractos naturales que lleva? Pues según la etiqueta, tenemos aceite de macadamia, aloe vera, té verde, agua de hamamelis, extracto de orquídea, aceite de rosa y argán, extracto de avena, centella asiática y camomila. Tenemos jalea real, extracto de regaliz, cebada, yema de huevo y extracto del fruto de la rosa canina. No está mal.

Un fifty-fifty más o menos. Como siempre os digo, yo no tengo tendencia quimiófoba (o como se escriba) a no ser que todo en la fórmula de un cosmético esté basado en químicos "chungos" o haya algún ingrediente en concreto que sepa a ciencia cierta que me va fatal para la piel. Este cosmético en concreto tiene algunos ingredientes malos, como el phenoxyethanol o el triethanolamine, y usa silicona (dimethicone), lo cual veo prescindible, pero bueno, ahí están y están en muchísimos productos, normalmente mucho más baratos que éste.

Ahora paso a contaros cómo me ha funcionado.

De entrada, os diré que es agradable de usar porque se absorbe muy bien y muy rápido. Esta crema es bastante más liviana de lo que se espera en un contorno de ojos (que a veces pueden ser muy contundentes; me pasó con el archifamoso de aguacate de Kiehls, era pesadísimo para mí) y es un punto a su favor. El tarrito os cundirá muchísimo y lo he usado tanto de día como de noche, sin notar que me cargara la piel y sin ninguna reacción adversa. La zona del contorno me la ha dejado fresca e hidratada.

Otra cosa que debo deciros es que yo no tengo ojeras ni bolsas. De la forma que he podido poner en "jaque" a las promesas de esta crema de Cremorlab ha sido esos días que no duermes bien y te levantas con los ojos hinchados cual besugo. Bueno, pues en esos días la crema me ha ayudado a reducir la hinchazón, y lo notaba mucho si ese día no había dormido y no me la había puesto, porque la bolsita bajo el ojo era más perceptible y tardaba mucho más en desaparecer. 

Eso es lo máximo que puedo deciros del supuesto efecto "anti puffiness" del que nos habla la marca, porque es, sinceramente, el único que he notado. No sé si actúa eficazmente contra los círculos oscuros y bueno, efecto antiarrugas... hidratada y cómoda sí que deja la zona, pero no he notado yo que esté más firme ni más tensa. Milagros a Lourdes...

*Puntuación Total: 3/5.

¿Volvería a comprarlo? Pues me temo que no. Y menos con el precio que se maneja el muchacho. Es un contorno bien intencionado pero que se queda corto en muchas de sus promesas. Es cómodo, es agradable y es eficaz contra la inflamación, pero no me ha seducido nada. Así que lo gastaré o cambiaré a otro si me aburro antes de terminarlo. Me ha dejado un poco indiferente, la verdad. Ya que el tónico y la esencia me gustaron tanto, pensé que igual éste iba a convertirse en mi contorno de ojos predilecto... mira que es difícil encontrar uno que me encaje del todo.

Pues nada más, corazones... que la Saga Cremorlab no se acaba aquí, ¿qué os creíais?? Aún tengo dos limpiadores y una bruma facial mineral (love total) que me dará para otras cuantas jugosas reseñas... muajajajaja.

Lo dicho, es todo por el momento. Como siempre, procurad ser muy felices y recibid un abrazote enorme de mi parte. ¡Nos vemos en la próxima entrada!

jueves, 12 de septiembre de 2019

Review: Amazing Tea Tree de Grinif (espuma limpiadora, tónico en mist y crema)




¿Qué tal, hermosos? Y la semana, ¿cómo va? Espero que muy bien.

Os he hablado en algunas ocasiones de las bondades del árbol del té como ingrediente purificante y anti acné, ¿verdad? Para mi piel resulta bastante eficaz cuando se trata de minimizar brotes de granitos causados por estrés o cambios hormonales.

Precisamente de él quería hablaros en esta entrada... bueno, de él como ingrediente estrella en el kit que compré a KMall24 hace ya una temporada: tres productos de la línea Amazing Tea Tree de la marca Grinif.



Grinif se establece como marca en 2012 y depende de una compañía llamada Food & Soap Co. Sus principios se basan en: 1.Usar ingredientes naturales en sus fórmulas, 2. Que sus fórmulas sean funcionales y prácticas, 3. Ofrecer unos productos a precios asequibles y 4. Procurar que los clientes queden satisfechos con sus productos. Casi nada...

Así que resulta una marca relativamente reciente. De hecho, su línea de Tea Tree es de 2017. En la web oficial sólo veo dos líneas de producto: la de Rosa y la de Árbol del Té, aunque en la cabecera pueden verse otros productos de otras líneas, como la Milky Tone up Cream o una línea para hombres, la All in One 4 Gentleman. Pero ninguna de las dos está en reflejada en la lista de productos.



Bueno. Yo os hablaré de tres de los productos de la línea Amazing Tea Tree: espuma limpiadora, tónico en mist y crema hidratante. Existe un cuarto producto en la gama, que es el cleansing gel, pero no estaba incluido en el kit de oferta.

Ni que decir tiene que, aunque os hable en la reseña de los tres productos a la vez, no uso todos al mismo tiempo, es decir, no interrumpo de golpe mi rutina "normal" para dar un giro drástico de 360º y probarlos todos. Los productos nuevos se introducen poco a poco para valorar las reacciones de nuestra piel y así controlar que nos vengan bien. Para probar tres productos nuevos hacen falta unos cuantos días, vosotros debéis valorar cuántos porque es algo bastante personal. Por mi parte y por si os sirve de ejemplo, en introducir estos tres productos en mi rutina tardé un par de semanas y ya me pareció que iba como una bala mientras hacía experimentos con el desodorante casero... 

Normalmente, en mi caso, cuando un cosmético no se adapta del todo a mí suelo darme cuenta rápido porque se traduce en brotes de acné, grasa extra, rojeces y bastantes brillos, aunque no es así en el 100% de las ocasiones. Hay veces que el producto reacciona o da un mal resultado a los cuantos días (el Blue Radiance Enzimatic Serum), aunque no suele ser la tónica general de mi piel. Pero, evidentemente, cada una es un mundo y debéis estar pendientes a las señales que os manda la piel cuando probéis algo nuevo, por simple precaución. A veces nos da el ansia de probar cosas, pero debemos ser precavidos si luego no queremos arreglar desaguisados (léase la entrada catastrófica del desodorante DIY).

Pues nada, dicho esto, empecemos a desgranar producto a producto de esta mini rutina destinada a purificar y limpiar en profundidad las pieles problemáticas y propensas al acné.


*Amazing Tea Tree Foaming Cleanser: este formato es mi favorito cuando se trata de un limpiador en espuma. Es líquido y al hacer pump se transforma en espuma. Suelen ser espumas muy volátiles y delicadas, nada densas, e igualmente suaves con la piel. Mi adorada 1000 Roses de Andalou Naturals es también de este estilo.



Como me deshice del embalaje, ésta es la foto más grande que he podido conseguir de la lista de ingredientes. Sobre una base de agua de hoja de árbol del té (59%), tenemos un producto químico al 90% con surfactantes derivados del coco y considerados seguros (sin embargo, en la lista del EWG el Cocamidopropyl Betaine está en riesgo 4 y en la web de Freshly Cosmetics aseguran que presenta una baja irritabilidad y reducen las posibles irritaciones, así que tenemos opiniones para todos los gustos). 

Al final de la lista de ingredientes tenemos el activo propiamente dicho, el aceite del árbol del té a una proporción muy baja, el 0,02%. 


Aunque la fórmula, así descrita, puede parecer corriente y moliente, os aseguro que como producto funciona de maravilla. Eso sí, este tipo de espuma es muy ligera, muy poco densa, por lo que probablemente como única limpieza se os quede un poco corta, puesto que los maquillajes completos o las bb difíciles no las limpia en profundidad. Sin embargo, resulta muy adecuada para tratar brotes de acné, rojeces e inflamaciones de la piel. Mejora el aspecto de ésta sin resecar y ayuda a la cicatrización.

Eso también, el olor a árbol del té no no lo vamos a ahorrar ni teniendo tan poco aporte de aceite... qué le vamos a hacer.

*Puntuación Total: 4/5. 

Funcionar funciona, pero debería tener más aporte natural a mi parecer, aunque un 59% de agua de hoja de árbol del té está bastante bien y supongo que por eso me resulta tan eficaz.



*Amazing Tea Tree Toner Mist: Tónico en spray de la misma línea, formulado a base de agua de hoja de árbol del té. Se presenta en un bote de plástico rígido, de tonos verdes degradados, con un dispensador de spray corriente aunque efectivo. Su capacidad son 100 ml. Pulveriza una bruma muy fina y agradable, no "arroja" el producto a chorro como otros dispensadores, sino de forma muy delicada.


Éste es mi favorito de los tres productos. El aporte de agua de árbol del té sobre el que está basado es del 89%, que está muy, muy bien. Me gustan mucho estos tónicos en "mist" o "bruma" porque lo puedes aplicar directamente sobre el rostro pulverizando sin tener que recurrir a otro envase o bien puedes aplicarlo con un algodón, lo que más te guste. Yo lo uso de los dos modos.

Además del agua de árbol del té lleva agua de hamamelis, que me encanta y que ayuda muchísimo con las inflamaciones y las rojeces provocadas por los dichosos granitos. De nuevo el aceite de árbol del té es sólo una proporción del 0,02%, pero lo suficiente como para conservar el aroma (que detesto, por cierto).

Resulta un tónico ligero y muy refrescante. Y además, eficaz. Igual que la espuma, aporta calma a las pieles problemáticas, aunque quizá se quede un poco corto en cuestión de hidratación.

*Puntuación Total: 4/5.

Me gusta, aunque no es todo lo hidratante que necesito. Lo que sí hace es que trata muy bien los granitos y ayuda a secarlos y a mejorar su aspecto. 


*Amazing Tea Tree Cream: pues eso mismo, la crema hidratante de esta mini rutina de emergencia. El bote es airless y es una preciosidad con esos tonos de verde. Tiene una capacidad de 50 ml. 


Aquí tenéis la lista de ingredientes. El nivel de agua de hoja de árbol del té es también curioso aquí (un 74%) pero el 90% restante es todo ingredientes químicos salvo la manteca de karité y los aceites de árbol del té y lavanda, aunque no se especifica en ninguno de ellos el porcentaje exacto que lleva.




No es nada pesada ni densa al aplicarla, aunque el rostro tarda un poco en absorberla. Realmente esta crema me deja un poco indiferente por sí sola, aunque tengo que reconocer que, usándola junto a los otros productos, ayuda mucho a que los brotes de acné mejoren más rápidamente.

*Puntuación Total: 3/5.

Pues sí... de preferir, prefiero tratar los brotes de acné con la espuma y el tónico y complementar esta rutina con los pads de Desert Essence, muchísimo mejor formulados y con un aporte de aceite de árbol del té mucho mayor. La crema, bueno, no está mal, pero lleva muchos ingredientes químicos y el que me resulta realmente efectivo está en una proporción muy baja (me refiero al aceite).

Ésta es mi opinión sobre los productos... en sí misma, la mini rutina completa para tratar brotes de acné está bien, obviamente si se usan juntos la eficacia de los ingredientes es bastante mayor. 

Pero por mi parte seguiré usando el tónico como bruma de uso diario (viene genial también para sellar la BB cream, que es mi último paso de la rutina de día) y la espuma para mis granitos ocasionales. La crema no la seguiré usando, como os he dicho, prefiero con mucho los pads.

En fin, corazones... hasta aquí la reseña de estos productos de Grinif. ¿Conocíais vosotros la marca? A mí me sonaba de poco, la verdad...

Pues lo dicho... hasta aquí por hoy. Si tenéis alguna duda o pregunta, o simplemente comentar algo, ¡me hará mucha ilusión responderos!

Un abrazo muy fuerte y nos vemos en la próxima entrada. ¡Sed muy felices!

jueves, 5 de septiembre de 2019

Cosmética Casera: Desodorante en crema con bicarbonato, ¿sí o no?



¡A las buenas, corazones! ¿Qué tal todo? Espero que muy bien. La vuelta al cole aquí a la esquina... el peque empieza ya la semana que viene porque ésta estamos de Feria en el pueblo. Ay mi pobre, qué mayor se me ha hecho ya.

Que empezara a hacer mis propios pinitos en el vasto y ancho mundo de la cosmética casera era cuestión de tiempo (y vaya si me he resistido, vaya que sí). Que naciera el peque no ha hecho más que postergarlo, pero inevitablemente he caído. Y por ello, os traigo esta entrada hoy. ¡Mi primer cosmético casero! ¡Con cuatro ingredientes y lo que es mejor, que me ha costado cuatro perrillas de ná! XD Con nada que se entusiasma una...




Pero no echemos tan rápido las campanas al vuelo. Os explico. No tengo yo (tenía) ninguna inquietud con hacerme mis propias cremas. Soy mamá trabajadora y el poco tiempo del que dispongo es todo un lujazo para mí, así que intento aprovecharlo bien. Y la verdad, habiendo tanta oferta potinguil a precios asequibles en el mercado, ¿por qué gastar tiempo y esfuerzo en algo que ni siquiera sé si me gustará? Que yo soy muy manitas, pero una cosa son las manualidades DIY y otra usar los productos que haces tú misma en tu cara y cuerpo... en fin, que no.

Pero llegó Saponaria Soaps y su maravilloso desodorante en crema Artic Deo y me encantó. Me duró menos de lo que esperaba, quizá por abuso, porque con el verano tórrido de estas tierras sabe dios que al principio de usarlo no me fiaba un pelo de que no me "abandonara". Pero claro, probadora incansable como soy, probé después el Bálsamo Desodorante de Naay (que era más barato y parecía majete) y no me funcionó igual de bien, puede ser que porque llevaba menos aporte de bicarbonato del que yo necesitaba. Quise volver al de Saponaria, pero eran 10 eurazos. Así que recordé que una amiga de un grupo de WhatsApp nos había comentado que ella hacía su propio desodorante con muy pocos ingredientes y que funcionaba muy bien.

Pues como además soy una curiosa sin remedio, allá que me voy a Internet a investigar. Y encuentro varias recetas, entre ellas ésta:


De maravilla. Y con ingredientes que tenía por casa. Allá que esa misma tarde me pongo manos a la obra. De todos modos, precavidamente, sólo hice la mitad de la receta (igual que con las de las magdalenas, por si no te apetecen tantas) por si el mejunje en cuestión no me convencía.

Así que yo lo hice tal que así:

*Siete cucharaditas de bicarbonato de sodio (usé el de Mercadona, en casa no me falta porque es un básico en los juegos sensoriales que preparo para el peque).
*Cinco cucharaditas de crema corporal. Cogí mi favoritísima, la Mommy Firming Massage Lotion de Shea Moisture, que guardo celosamente para el invierno. Si encima podía usarla como desodorante, ya sería feliz forever and ever.
*Media cucharadita de aceite de coco.
*Dos cucharaditas de maicena.
*Cinco gotas de aceite de cáñamo. Esto ha sido un plus. Lo adoro absolutamente y pensé que, con sus maravillosas propiedades hidratantes y calmantes podría ser un buen contrapunto al "impacto" que hace sobre la piel el bicarbonato (aunque yo no he tenido reacciones adversas nunca... Aunque... Seguid leyendo).

En la receta original advierten que la crema sea lo más natural posible; obviamente si estás haciendo un desodorante casero con la idea de ponerte un cosmético más "natural" es absurdo que la base, la crema, esté llenita de químicos. Ya os he contado las bondades de esta crema corporal, la que adoro. Lo bueno de esta receta es que puedo ir cambiando la crema base y el perfume será diferente cuando me aburra de uno u otro. Por eso elegí ésta, de hecho, me posibilita cambiar dentro de la sencillez que tiene en su elaboración: simplemente hay que mezclar muy bien los ingredientes, siguiendo los pasos de la receta. No tiene más misterio.



Éste fue el resultado. Con la mitad de la receta llené este tarrito, que tiene una capacidad de unos 90 gramos, lo cual está muy, pero que muy bien porque apenas os saldrá por un par de eurillos fabricarlo.



La textura va a cambiar mucho según la crema corporal que uséis como base, pero, sea la que sea, los granitos de bicarbonato serán perceptibles, igual que en los desodorantes comerciales que lo llevan, así que tendréis un desodorante en crema de textura granulosa, arenosa. En este caso, los granitos van desapareciendo a medida que masajeas la crema por la axila y particularmente, a mí no me molestan (ya estaba entrenada del Artic Deo de Saponaria, jajajaja).

Bueno, y diréis, ¿merece la pena liarse la manta a la cabeza con la cosmética casera? ¿Cómo resulta este desodorante DIY?

Pues si os tengo que ser sincera, he tenido que reescribir esta entrada. El entusiasmo me ha durado como una semana, y eso que me encantaba absolutamente cómo me estaba funcionando este cosmético casero.

PERO.

Al llevar bicarbonato protege contra el mal olor y podéis estar seguras de que no os pondrá en un apuro, eso sí. Como os digo, he usado otros desodorantes con bicarbonato y mi piel nunca ha protestado por ello.
A los cuatro o cinco días de usarlo la crema fue cambiando de color. Pasó de ese beige tan bonito a esto:


Primera sospecha. ¿Qué habrá pasado? Pero como ni el olor ni la textura de la crema habían cambiado, pues seguí usándolo sin más suspicacias hasta que una buena mañana me despierto tal que así:



Perdonad por las fotos de la sobaca, pero mirad qué desastre. La piel está hecha una pena. No sé exactamente si ha sido porque la mezcla ha reaccionado de algún modo (aparte de que exudaba algo de aceite, no ha habido cambios ni en la apariencia ni el olor, ni siquiera en la textura) o porque usarlo dos veces al día (como máximo) es "abusar" de él (que lo hacía con el de Saponaria y nunca pasó nada de esto) y eso que la cantidad que me ponía era mínima. La cuestión es que, después de estar más de una semana encantada de la vida usándolo, ahora me encuentro con esto. Ni que decir tiene que mi experimento se ha ido derechito a la basura (Sigh).

Así que nada. Mi gozo en un pozo. Ya decía yo que me había resultado muy sencillo de preparar, muy cómodo y barato. Había trampa... menos mal que al par de días de usar una buena crema reparadora, mi piel ha vuelto a la normalidad, no más rojeces ni picores. Hacía muuuucho tiempo que no tenía una reacción tan heavy con un cosmético... lástima.

*Puntuación Total: 1/5.

Así que ya os digo. Si sois fans de lo natural y lo casero, podéis apañaros un desodorante estupendo y eficaz por cuatro duros, y con ingredientes que probablemente podréis tener por casa. Pero ojo, tened mucho cuidado con las reacciones, no os pase como a mí. Yo he quedado un poco escaldada con esto de la cosmética casera, aunque no descarto lanzarme con algún otro acercamiento a la cosmética DIY cuando se me haya olvidado la decepción... ¡a ver qué hago finalmente! Conociéndome, volveré a intentarlo, seguro...

Pues lo dicho, corazones, si aún tenéis curiosidad y queréis probar, os dejo un enlace con varias recetas, para que elijáis la que más os convenza:






Nada más por mi parte, chicos. ¡Cuidado con los experimentos caseros! Pasad una muy feliz semana y nos leemos en la próxima entrada. ¡Un abrazo muy fuerte!