Review: Elemis Limpiador Facial Alisador

¡Buenas tardes, muchachada! ¿Cómo os fue la noche de Halloween? ¿Mucho miedo? ¿Muchos caramelos, los que fuisteis a pasear a los peques?

Por aquí muy bien, la verdad. Aparte del berriche de Bebé cuando no se quiso poner el gorrito del disfraz de murciélago (y que era graciosísimo), nos lo pasamos genial. Nos encontramos a los niños del cole y les repartí las galletas que había hecho y las bolsitas con las chuches que llevaba preparadas. Nos hicimos fotos y pasamos un rato muy agradable.

Hoy os traigo la review de un limpiador facial. Creo que es el cosmético al que soy menos fiel, no me preguntéis por qué. Dejando aparte que me encanta probar cosas nuevas, con los limpiadores faciales es aún peor: creo que en toda mi vida potinguil no he repetido con ninguno. Y el de la reseña de hoy no va a ser una excepción... pero no adelantemos acontecimientos aún.

El limpiador que voy a reseñar es el Dynamic Resurfacing Facial Wash de Elemis. Marca que tampoco conocía. Últimamente hago muchos descubrimientos potinguiles y me atrevo con casi todo... la marca en cuestión, Elemis, es inglesa. Es una marca de gama media, es decir, no es excesivamente cara pero tampoco puede considerarse low cost.

Se describen a sí mismos (en una web preciosa y muy elegante; he visitado la inglesa porque la española no funcionaba) como "el número 1 de la cosmética británica de lujo", y su filosofía es llegar a un equilibrio entre ciencia y naturaleza, usando ingredientes naturales a la vez que una cuidada investigación científica para lograr unos cosméticos que puedan obtener resultados satisfactorios. 

Bueno, eso es más o menos lo que dicen muchas marcas de cosméticos. Lo que a mí realmente me llamó la atención fue: 1. Que no testa en animales y lo deja muy claro en el envase del producto; y 2. Es un limpiador libre de colorantes artificiales, parabenos, SLS, SLES y aceites minerales.

El limpiador facial Dynamic Resurfacing forma parte de un programa antienvejecimiento de Elemis, que incluye también un sérum. Se avisa que durante su uso hay que usar un protector solar de factor alto. Mi BB cream lleva 40 SPF de protección, así que por eso, sin problema. Según el folleto explicativo que incluye la caja (que es muy bonita y profesional, con detalles en plata y gris) este limpiador posee una tecnología patentada de tres enzimas, que ayuda a revelar una piel más luminosa a la vez que restaura el tono natural y estimula el ciclo de renovación celular.

El envase tiene 200 ml, es de plástico y el dosificador es tipo pump, muy cómodo. Si echamos un vistazo a la lista de ingredientes, vemos que tiene galactoarabinano, un polisacárido del alerce patagónico, que es conocido por su efecto exfoliante no abrasivo. Además, lleva aceite de babasú (que personalmente yo conocía de la línea para bebés de Shea Moisture) que es un hidratante excelente, y moringa, que es un ingrediente antioxidante. Por último, el extracto de trufa blanca suaviza la piel.

Pues os diré qué me ha parecido. No está mal. La textura es fluida y no hace mucha espuma, con lo cual el aclarado es fácil y rápido. Es cierto que deja la piel más luminosa, pero el efecto es pasajero. Y limpia bastante bien. Yo no diría que en profundidad, pero deja una una buena sensación de frescura. El efecto alisante no lo he notado, aunque tampoco creo (en mi opinión, claro está) que sea real.

Y ahora os diré el gran inconveniente. El olor. No lo soporto. No es que huela mal, todo lo contrario. Huele demasiado a perfume para mi gusto. Afortunadamente se disipa rápido, pero es muy cargante para mí. Esa es la razón principal por la que no repetiré con él. Eso, y que los 200 ml no cunden demasiado para los 25 euros que cuesta. Además y como ya os he dicho, no soy fiel a los limpiadores faciales.

Puntuación Total: 2/5.

Lo siento. No es mal producto, pero el olor puede conmigo. Me recuerda a un perfume empalagoso de señora mayor. Probablemente compre más productos de esta marca (las ediciones limitadas tienen pintaza) pero este limpiador no me ha convencido en absoluto.

En fin, chicos... otro poti que se va a la categoría de prescindibles. Aunque la marca Elemis promete... ¿habéis usado algo suyo?¿Me recomendáis algún poti en especial? ¡Contadme!

Pues nada, amores... por hoy nada más. ¡Un besote muy gordo y nos vemos en la próxima entrada!